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La industria de la palta sigue dando lecciones a la fruticultura de Chile. Después de una temporada 2024/2025, con mayor producción y precios atractivos, analizamos los mercados ya en pleno desarrollo de la nueva temporada, en la confianza que las señales indican que es una industria madura y sostenible.
La palta es sin duda una de las frutas más apreciadas en este momento y particularmente en el mundo latinoamericano, de donde es originaria. En Chile, hemos alcanzado 8,6 kilos por habitante de consumo al año, uno de los más altos consumos en el mundo. Es verdad que hay otros países latinoamericanos que tienen consumos similares o mayores, sin embargo, están enfocados en paltas locales muy acuosas que se consumen como jugo, y aquí estamos hablando de palta Hass particularmente, la que hoy domina el comercio internacional.
Pero cuáles son las lecciones que la última temporada finalizada en junio, nos deja para el resto de las frutas:
A veces llega a ser más del 50% del total de la producción y este consumo no es casualidad, fue trabajado a inicios del milenio y quedó arraigado en la dieta de los chilenos, como un producto transversal de consumo habitual. Con todo lo que ello implica en mejoramiento de la dieta, es una fruta que aporta grandes beneficios para la salud, es un producto producido localmente y con el cual se realizan platos específicos que son típicos de Chile, es decir, aporta también al patrimonio culinario de Chile. No hay otra fruta en Chile que tenga estos niveles de consumo interno y lo más atractivo, es la disponibilidad a pagar altos precios por el producto. Esto es un un atractivo para los productores y comercializadores que hoy día se debaten entre enviar al mercado interno y exportar, sin embargo, esto permite colocar la producción correcta en el mercado correcto. En este caso el mercado correcto de Chile es un mercado exigente, que busca una palta de alto contenido aceite, sabrosa y de larga duración.
La producción de palta hasta hace unos 7 años atrás estaba muy concentrada en las regiones de Valparaíso y en menor proporción en la región de Coquimbo, particularmente en la quinta Norte. Con la sequía que Chile sufrió y que todavía sigue presente, hubo arranque y/o abandonos de muchas hectáreas de paltos, esto produjo una disminución de la producción y el incremento consiguiente del precio de la palta en el mercado interno. La búsqueda de otras zonas productivas particularmente la Región de O’Higgins costa, es hoy día es la segunda zona de mayor importancia en la producción de paltas en Chile. Pero no solo la Sexta Costa es la que está produciendo paltas, se siguen buscando nuevas zonas, e incluso hay proyectos que se han establecido en Arauco costa, buscando producir paltas en otras condiciones y extender la producción de este cultivo.
La sequía de la quinta Norte no solo trajo un problema con los paltos, sino un problema de abastecimiento de agua a la población. Incluso se denominó en algún momento al palto como responsable de la baja disponibilidad de agua para la población. Si bien es cierto que el palto ocupa una mayor cantidad de agua que otros cultivos, por ser una especie perenne y activa todo el año, además la densidad nutricional de la palta es muy alta y requiere mayor actividad de la especie, aun así, no son volúmenes ingentes de uso del recurso, solo que se dio una coyuntura de falta de disponibilidad de agua en una zona con una alta concentración de población.
Actualmente se ha demostrado que el palto no solo NO consume esas cantidades ingentes de las cuales se hablaba, sino que aporta a la absorción de CO2 porque sus hojas permanecen activas durante todo el año y podemos decir que en Chile el palto es Carbono negativo. Actualmente la Huella de Agua del palto en Chile está en nivel medio, a un nivel similar de Nueva Zelandia. Los niveles más altos los tiene Australia y más bajos los tiene California (https://paltahass.cl/huella-del-agua-y-estrategias-de-manejo-de-recursos-hidricos/). En Huella de Carbono, tiene los niveles mínimos comparados con otros cultivos y en ciertas condiciones, la huella de Carbono es negativa (https://paltahass.cl/huella-de-carbono-en-productos-de-exportacion-agropecuarios-de-chile/), incluso se ha estudiado la alta capacidad de regeneración que puede tener el palto en los ecosistemas (https://paltahass.cl/huella-de-carbono-en-productos-de-exportacion-agropecuarios-de-chile/).
Las paltas chilenas hace 30 años se enviaban en su mayor parte al mercado de Estados Unidos, el cual se complicó para Chile por la apertura hacia la palta mexicana. Después de unas temporadas de prueba, encontró su espacio en el mercado más competitivo para el producto que es Europa. A este mercado acuden las paltas de los proveedores africanos, otros proveedores europeos, latinoamericanos, Sudáfrica y otros. Por lo tanto, la pregunta es ¿cómo vamos a competir en un mercado con tanta competencia?. La industria de la palta en Chile ha entendido que la calidad del producto es lo único que puede garantizar un negocio en un ambiente de alta competencia. De hecho, cuando llega la palta chilena a Europa, el precio al cual accede es superior al que en ese momento se encuentra disponible. Esto se debe a la condición particular de Chile de clima mediterráneo que produce una palta más sabrosa con mayor contenido de aceite y que es capaz de tener una vida de postcosecha mayor a la de la competencia tropical.
Estas son las lecciones que podemos sacar para el resto de la fruticultura. Identificar cuáles son los atributos de valor de nuestro producto, producir con un alto estándar de calidad, encontrar la oportunidad de acceder al mercado cuando se ha despejado de palta de menor calidad y obtener los mejores retornos para la industria completa, es una gran tarea. Actualmente, la probabilidad de encontrar ventanas de comercialización en los diferentes productos que provee Chile al mundo, son cada vez menores y la única forma de permanecer en el negocio es esta. Estar dispuestos a competir y a jugar el rol de proveedor de alta calidad, con un equipo de comercialización que defienda esa posición y defienda los atributos de valor de nuestro producto.
Damos las gracias a todos los que colaboraron en este anuario, especialmente a todos nuestros auspiciadores. Esperamos que disfruten su lectura. CLIC AQUÍ
